Se podría decir que ella era su todo y él era el suyo, y sin embargo ella no se lo demostraba. Él daba y daba pero nunca recibía, y cada día más enamorado entregaba cada día, hora, minuto y segundo de su vida para poder estar junto a ella.
Ella le quería, y tanto que le quería. Pero era demasiado idiota como para darse cuenta de que ninguna relación dura para siempre.
Y llegó el día en que se arrepentió de su egoísmo.
No tenía otra palabra más que estúpida. No se daba cuenta de quien tuvo a su lado todo ese tiempo, y para cuando se dio cuenta ya era demasiado tarde.
Lo perdió como perdió a muchas otras personas, pero este le afectó más que cualquier otra pérdida. Él la había querido como nadie lo había hecho, y ya nadie podría igualar todo el cariño que recibió. Ya lo único que le queda eran todos aquellos bucólicos recuerdos, pequeñas cosas que le hacen vivir aquellos alegres momentos que no supo aprovechar...Millones de momentos guardados en una pequeña cajita.
Infinitas fotos de carné, un disco con todas sus canciones, una caracola llena de arena de aquella tarde en la playa, miles de cartas todas acabadas en un "para siempre"...
Pero ya no le servía de nada lamentarse.

"Once upon a time, was falling in love
But now, just falls apart
There is nothing I can do
Once upon a time there was light in your life
But now, there's only love in the dark"